lunes, 24 de junio de 2013

6.- . Los dos momentos más importantes para comer son al levantarse y después de entrenar.
Necesitas combustible en el depósito para poder entrenar fuerte, y si no lo llenas en el desayuno te quedarás sin energía. Asegúrate de que gran parte de tu desayuno conste de carbohidratos, con alguna proteína, quizás en forma de claras de huevo. Un yogurt bajo en grasa, o leche y cereales, también servirán. Es igualmente importante la ingesta que se hace inmediatamente después de una sesión de ejercicios, ya que es el momento en que las células de tu organismo son más receptivas a recuperar la energía que acabas de gastar. Puedes probar con algún preparado que contenga una buena cantidad de carbohidratos y también algo de proteína. Pero en los 90 minutos siguientes al ejercicio debes consumir una comida más nutritiva, que consista en carbohidratos complejos y proteína completa.

Y ahora vamos al tajo, vamos a entrenar y lo primero es:
Aprender la técnica adecuada, puede ser un poco complicado, teniendo en cuenta que cada movimiento de cualquier ejercicio tiene sus propias particularidades. 
Pero eso de "un poco complicado" no quiere decir que se trate alguna técnica secreta. Se trata de si estás dispuesto a aprender, por tu cuenta o apoyándote en un buen número de fuentes, incluyendo un compañero de entrenamiento con experiencia, un seminario de grupo o, digamos, contenidos como los que puedes leer aquí. 
También puedes contar con programas de entrenamiento bien diseñados que distribuyen esos ejercicios de una manera coherente. Pero tanto si decides hacerlo por tu cuenta o contratar los servicios de un entrenador personal certificado, los siguientes consejos son válidos para todo el mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario